CHAN.MX

Definitivamente mi negro, las montañas en México son raras, de por si las montañas en el mundo son sombrías pero y a pesar de que jamás he escalado ninguna otra o hecho cumbres fuera del país más que en Guatemala en Acatenango, solo en México he sentido que las tierras rechazan de una u otra manera a los humanos a pesar de no ser las más altas o peligrosas.

He tenido experiencias en el Iztaccihuatl, Los Dinamos, el desierto de los leones, el Ajusco y Pico de Orizaba de tiempos perdidos. Acostumbro a escalar solo,trekking y escalada en roca igualmente solo pero en muchos bosques he experimentado cosas raras como sentir que camino durante horas y solo haber caminado durante minutos o viceversa. Incluso, por ejemplo en el Izta una vez al subir hasta la cabeza puedo jurar que llegados un punto en el pecho empecé a hablar con otro alpinista que se unió a mi y con el que me sentí cómodo subiendo, pero me sentí asqueado y asustado cuando al estar en la cima del todo y voltear para celebrar con mi acompañante, darme cuenta que no había nadie conmigo y que no había otro par de huellas en la nieve. A lo que quiero llegar es que, hay algo en estás tierras, algo mágico pero extraño que hace que las personas tiendan a experimentar más estás cosas, otro ejemplo en el Desierto de los Leones me encontré a una pareja de personas que buscaban a una niña que los había acompañado todo el camino pero que la perdieron de un momento a otro cuando se voltearon.

No lo sé anoncito, pero hay algo raro en los bosques y montañas de México, algo que rechaza a los humanos, mantente seguro y si nos encontramos un día en el camino, invitame una barrita integral.